-Cuando escriba así, por favor detenme
Al igual que siempre espere una respuesta que a veces llegaba y muchas otras no, después de pensar un rato escupiste:
-¿tan malo es?
-es demasiado vendido, no quiero escribir por que me paguen, no quiero hacer a mis amigos personajes de cuentos, robándoles con su confianza una suculenta historia, no quiero escribir que el amor lo es todo o que el mundo es perfecto, no quiero hacer revolución y mucho menos vender papeles impregnados de morbosidad disfrazada de erotismo.
Te mire a los ojos, esperando la respuesta que no llego, lo que aun no concibo es:
¿Por qué me quitaste mi pluma?